La sexualidad en el climaterio

La sexualidad en el climaterio

El climaterio y la sexualidad están intrínsecamente unidos, tanto por la biología como por las emociones y la sociedad en que vivimos.

 

La sexualidad es una energía vital que nos acompaña durante toda la vida. Cumple con dos finalidades básicas: una reproductiva y otra placentera. Por eso, cuando la capacidad reproductiva cesa, la sexualidad no lo hace, ya que la necesidad de sentir placer permanece siempre.

El climaterio es una crisis vital, que como toda crisis, produce cambios tanto orgánicos como psicológicos.

Las vivencias que despiertan estos cambios dependen fundamentalmente de la personalidad de la mujer y de las situaciones ambientales que la rodean (familiares, de pareja, sociales y laborales).

Desde el punto de vista fisiológico el climaterio implica el cese de la menstruación (menopausia) y, por lo tanto, de la capacidad reproductiva. La disminución de los estrógenos, hormona femenina, puede traer aparejados algunos síntomas físicos (dolores de cabeza, «calores», descalcificación de los huesos, mareo, fatiga, dolor de cuello y de las mamas).

Como en toda crisis vital, desde el punto de vista emocional, se pierde la estabilidad anterior; lo cual puede manifestarse como confusión, angustia, depresión, desubicación con respecto a los proyectos de vida, competencia con las mujeres jóvenes, vivencias de vacío por la independencia de los hijos.

La intensidad de este desequilibrio emocional y el tiempo de su resolución depende de la personalidad de cada mujer y de los logros vitales que haya tenido hasta ese momento, ya que el climaterio es también tiempo de Balance.

Los mitos son falsas verdades, que cada cultura crea y que se van transmitiendo de generación en generación. La menopausia no queda libre de ellos. Se dice que la menopausia inicia la vejez, que disminuye el deseo sexual y que marca el final de la vida sexual. Veamos cada uno de ellos:

Acerca de la vejez, recordemos que la sociedad actual sólo acepta a los jóvenes (menores de 30 años) y bellos como único modelo válido posible. En este sentido, quienes no cumplimos con esos parámetros, no tenemos derecho al placer. Cada persona acepta o no la imposición de este modelo según su autoestima y madurez.

La respuesta sexual se mantiene durante toda la vida si la persona es sana orgánica y psíquicamente.

A partir del climaterio, los únicos cambios físicos que se producen en las mujeres son la sequedad vaginal y la delgadez de sus paredes. Por este motivo, la penetración puede resultar dolorosa.

Sin embargo, las mujeres que llevan una vida sexual activa, suelen compensar la falta de lubricación ya que la frecuencia habitual revitaliza el funcionamiento genital. Consultar a su médico le ayudará a conocer las distintas alternativas existentes para sentirse sexualmente bien.

La disminución del deseo sexual está relacionado con vivencias emocionales negativas hacia la sexualidad, hacia la pareja o hacia sí misma. Inclusive, el aumento relativo de la testosterona (hormona del deseo), influye fisiológicamente en el aumento del deseo.

Según sean la personalidad previa de cada mujer y los factores ambientales que la rodean, durante el climaterio, la sexualidad puede ser vivida desde dos modelos posibles:

1.- Aquellas mujeres que fueron educadas rígidamente y que vivieron su sexualidad con culpa y obligación y sólo la aceptaron para formar una familia, cuando esta posibilidad desaparece, encuentran un justificativo para que desaparezca la finalidad placentera. Suelen renunciar a la sexualidad.

2.-Aquellas mujeres que vivieron una sexualidad plena y gratificante, suelen sentirse liberadas del temor al embarazo no deseado; por lo cual comienzan a vivir una sexualidad aún más placentera. Algunas mujeres logran su primer orgasmo en este período (por darse permiso para descontrolarse ya que el embarazo no ocurrirá).

El camino de acompañamiento emocional del climaterio como crisis vital está dado, fundamentalmente, por la toma de conciencia de que el bienestar depende de la decisión personal de buscarlo: ¿Cómo?

• Realizando un profundo balance de su vida.

• Recuperando el valor de los aspectos positivos y los logros alcanzados.

• Proponiéndose mejorar o modificar aquello que no sirvió hasta ahora.

• Planteándose nuevos proyectos y logros.

• Incrementando la comunicación con los amigos y con la pareja; permitiéndose el intercambio y la expresión de sentimientos y necesidades.

Recordemos: la disminución del interés y de la actividad sexual durante el climaterio, no dependen de los cambios fisiológicos sino exclusivamente de los factores emocionales que los rodean.

Por lo tanto: dependen de nosotras mismas.

Lic. Virginia Martínez Verdier

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *